viernes, 8 de junio de 2018

TEMA CORTO 4: LA BAJA EDAD MEDIA

La península Ibérica en la Baja Edad Media:
Los reinos cristianos
    4. La Baja Edad Media. La crisis de los siglos XIV y XV.
  • 4.1. La organización política. Las instituciones.
  • 4.2. Crisis demográfica, económica y política.
  • 4.3. La expansión de la corona de Aragón en el Mediterráneo.
  • 4.4. Las rutas atlánticas: Castellanos y portugueses. Las islas Canarias.
4.1 La organización política. Las instituciones.
Las instituciones evolucionan a lo largo del medievo y se diferencian en los reinos cristianos.
La monarquía de Castilla era, al principio, electiva, luego pasó a ser hereditaria desde las “Siete Partidas” de Alfonso X. El poder real era restringido por la nobleza pero desde el siglo XII los reyes se van haciendo fuertes poco a poco.
El rey tiene su corte y una curia (consejos de prelados, nobles, y funcionarios) y su territorio se divide en distritos bajo gobierno de los condes nombrados por el rey.
La monarquía de Aragón y Cataluña era débil ya que la nobleza era fuerte y dueña de sus feudos, así que pacta con el rey, y hay que esperar al rey Pedro IV para que el poder del rey sea fuerte y los nobles débiles.
El lugarteniente era el suplente del rey y el gobernador (tres) representan al rey en Cataluña, Aragón y Valencia.
 
Los municipios. La población libre dependiente del rey se agrupaba en villas o concejos realengos cercanos a las fronteras a donde la gente tenía reparar asentarse.
Los reyes para atraer pobladores les daba cierta autonomía mediante un fuero o mediante carta de población o de fundación. Así nacían los municipios.
A partir del siglo XII se asienta definitivamente el modelo que se hará fundamental para la vida del estado. Su régimen era abierto donde los habitantes exponían sus criterios. Los funcionarios locales eran alcaldes o justicias, jueces, mayordomo o merino, sayón o agente, y cuando el ayuntamiento pierde parte de su poder el rey les nombra al corregidor.
En Aragón y Cataluña al final los ciudadanos se dividían entre si en mano mayor, media y menor, en función de riqueza y poder. Cada municipio estaba regido por un veguer, un baile y varios jurados o consejeros.
 
Las Cortes eran los tres brazos del Estado; iglesia, nobleza y pueblo. Era un cuerpo consultivo sin potestad legífera, y su función era aprobar los impuestos solicitados por la corona, aunque a veces les dejaban resolver asuntos administrativos judiciales, llamando a sus resoluciones ordenamientos.
Las Cortes las convocaba el rey cuando quería, sabiendo que el voto era personal para los estamentos de nobleza y clero y representativo el del pueblo.
León celebró Cortes en 1188, Castilla en 1250, y desde Alfonso X siempre en sesión única.
 
La legislación seguía las pautas del Fuero Juzgo de los visigodos, hasta que aparecen las carta-pueblas y fueros. Desde Alfonso X con el Fuero real y Las Partidas se unifica el criterio de las mismas que se mejora con Alfonso XI y su Ordenamiento de Alcalá.
En Navarra se unifican con el Fuero general de Navarra o Sobrarbe y Navarra.
En Aragón la primera unificación de leyes nace con la Compilación de Huesca y la Recompilación o Obsevancia del Reino de Aragón.
En Cataluña se encuentran en los Usatges, Consuetudines Cathaloniae y el Consulta del Mar, este para asuntos del mar.
 
La justicia estaba bajo el rey y la curia que delegaban sus funciones en merinos, jueces o alcaldes. Se les reconocían como La Chancillería desde el rey Juan I.
El ejercito. El rey solía tener a su servicio a todos los individuos si se requería por fuerza mayor. Se crean las fuerzas reales con las mesnadas reales y señoriales, los concejos y las Ordenes Militares. El rey podía aumentar el número con mercenarios como los almogarabes en Aragón y las Compañías Blancas en Castilla
La marina en Castilla nace con el rey Fernando III el Santo, imitando el de Aragón.
Las Ordenes militares nacen como consecuencias de las cruzadas contra los islámicos. Las componen los freires o monjes (sujetos a votos de obediencia y castidad) y los seglares (militares), que obedecen a su prior o Maestre. Las Ordenes militares son: Calatrava, Santiago, Alcántara, y Montesa (Aragón) y cabe añadirse las extranjeras de Hospitalarios y Templarios.

4.2 Crisis demográfica, económica y política.
La crisis demográfica.
El fuerte crecimiento de las etapas anteriores sufre una grave parálisis motivado por la epidemia de la Peste Negra, acaecida a mediados del siglo XIV, provocando más muertes que todas las guerras juntas.
Los descensos de la población están bastante bien documentados en Cataluña, Mallorca, y Navarra, y se puede concluir fácilmente que la población de los centros o municipios se redujo en un 50% o se despueblan. Añadir que en algunas zonas hubo una parte de su población que se va asentar en nuevos núcleos como Bilbao.
Algunas regiones no muy afectadas recuperan parte de sus perdidas durante el siglo XV, cabe resaltar que Castilla y Navarra se recuperan parcialmente, no así Cataluña y menos la zona costera, pero a todo ello añadir que ciertos enfrentamientos bélicos hicieron que se aprecie menos, y también las nuevas aventuras del descubrimiento de América.
 
La economía de la Baja Edad Media se sigue basando en la agricultura y ganadería.
La agricultura. El campo era la fuente básica de la riqueza y a su cultivo se dedicaba la población. Los cultivos eran los destinados a la alimentación: los cereales, el viñedo y el olivo.
Las nuevas técnicas del arado de ruedas y rotación trienal llegaron a cuajar en el S. XIII.
Se hacían las faenas agrícolas con los arados romanos o el largo barbecho de muchos años.
Las conquistas incorporaron tierras fértiles del valle del Ebro, la huerta de Valencia y el valle del Guadalquivir que ayudo a mejorar los medios y las cosechas.
Las grandes extensiones de tierra eran pertenencia de los reyes y éste las cedía a monasterios, iglesia, nobles y hombres libres quienes la ocupaban naciendo el modelo de repoblación en función de la época y las necesidades ya vista anteriormente.
Los dueños tributaban en función de las tierras ocupadas y las actividades desarrolladas.
Andando el tiempo, se crean impuestos o tributos con base en derecho por lo que nace el ente público de la Hacienda.
Entre los tributos, cabe recordar el portazgo, el montazgo, herbaje, maquila, etc., que recaían sobre la propiedad. Los tributos de carácter general son pecho o petitum, alcabala (compra-venta), subsidios eclesiásticos (diezmos), almojarifazgo (aduanas), etc., los imponían las Cortes a petición del rey.
La ganadería. La oveja merina de buena lana fue un factor de expansión que aumenta la trashumancia. En Aragón se efectuaba desde el valle hasta las montañas pirenaicas.
En el reino castellano-leonés desde la cuenca del Duero hasta la meseta sur.
Los ganaderos se asociaron formando mestas de carácter local que, finalmente, en 1273, desembocaron en el “Honrado Concejo de la Mesta”, institución creada por Alfonso X. Existían tres grandes cañadas (leonesa, segoviana y manchega).
La Mesta estaba controlada por los propietarios nobles y las instituciones eclesiásticas.
 
Las ciudades son los centros de la artesanía y el comercio.
El comercio casi nace de modo espontáneo con las ferias, coincidiendo con los momentos solemnes eclesiásticos, se le dio importancia y seguridad con ordenamientos, privilegios y exenciones de tributos.
En estos lugares se germina el comercio internacional con sus importaciones o exportaciones lo que exige un nuevo desarrollo de las rutas de carretería, naciendo así con el título: La Cabaña Real de carreteros. Nacen los intercambios de productos entre unas regiones y otras. Para atender las necesidades artesanales y mercantiles se protegen los núcleos de población nuevos. Son los burgos o ciudades, que conocieron un desarrollo espectacular a partir del S. XIII.
El Camino de Santiago crea villas comerciales o feriales tanto en Galicia como en cualquier otro punto del trayecto.
Los nuevos dominios cristianos sobre el Al-Andalus aporta ciudades y centros como: Jaén, Mallorca, Córdoba, Valencia, Sevilla, (...).
Las actividades artesanales fueron creciendo en importancia, destacando la fabricación de textil en Cataluña y la naviera en las Atarazanas de Sevilla, desde el S. XIII.
La moneda no se acuña apenas, se sigue funcionando con las hispanorromanas y visigodas y árabes. El rey Alfonso VI acuña las primeras de vellón y con Alfonso VIII nace el maravedí de oro. Con ello el comercio se vio favorecido, por la creciente circulación de monedas, la mejora de los caminos y de los puentes y la concesión de ferias por los poderes públicos. Pero el comercio de ahora, por lo general, ya sobrepasaba de un ámbito regional, así que desde estos lugares de ferias y ciudades de mercado se germina el comercio internacional con sus importaciones o exportaciones principalmente de lanas.

4.3 La expansión de la corona de Aragón en el Mediterráneo.
a- La Corona de Aragón:
Jaime II continúa con la expansión de la corona de Aragón por el Mediterráneo y no devuelve Sicilia al papa pero a cambio si recibe el papado Córcega y Cerdeña incautados a los franceses.
Los catalanes y aragoneses hicieron varias expediciones por Oriente bajo el mando de Roger de Flor, llegando hasta Asia Menor donde se hacen con un gran territorio por lo que la envidia de los bizantinos le asesinan junto con parte de sus tropas. Estos almogarabes se encargan de su venganza, llamada Venganza Catalana y los posteriores enmarañamientos a favor del rey de Atenas, luego del de Sicilia, etc., todo acaba en manos de Pedro el Ceremonioso.
Bajo el reinado de Pedro IV el Ceremonioso, (1336-1387), hombre despiadado y cruel con todos incluso con su familia, el imperio mediterráneo de la Corona de Aragón se consolidó, Mallorca fue reincorporada en el 1343.Unos años más tarde en el 1377 Sicilia se integraba en la confederación aragonesa, pero Él debe de enfrentarse a la nobleza aragonesa, a la que vence en Epila, y castiga muy cruelmente a los vencidos.
Le sucede Juan I, quien se dedica vivir y a las cacerías muriendo en una de ellas. Hereda su hermano Martín, (1395-1410), bondadoso que unió definitivamente a Sicilia, murió sin sucesión, así pues, la dinastía se extinguió con su muerte.
La sucesión se resolvió en el Compromiso de Caspe en 1412 con el nombramiento de Fernando I (de Antequera) de la dinastía Trastamara a quien le sucedió Alfonso V, muy preocupado por los asuntos mediterráneos y el mecenazgo cultural. Alfonso V hace la conquista de Nápoles en el 1443
El descontento interno surge con Juan II (1458-1479) sucediéndose una guerra civil en Cataluña.
La burguesía representada por la Generalitat se oponía a la monarquía y ofreció la corona a varios candidatos, terminando la contienda en 1472. Surgió el Consejo Real, adquiriendo un gran desarrollo la cancillería regia. En el siglo XIV aparece la figura del Gobernador General, auxiliar del rey que designaba un lugarteniente en cada territorio y más tarde se creó la figura del virrey. El Justicia de Aragón era una institución original de este reino. Las Cortes funcionaban independientemente en Valencia, Aragón y Cataluña aunque a veces se reunían. De las Cortes surgió como delegación la Diputación y en concreto la Diputación General de Cataluña o Generalitat adquirió mucha fuerza.

b- La reconquista durante los Siglos XIV y XV en el reino de Castilla-León
A finales del siglo XIII comienzan las luchas internas entre la monarquía y la nobleza.
Desde la época de Sancho IV hasta el reinado de Alfonso XI, a mediados del siglo XIV todo el esfuerzo castellano-leonés se centró en torno al estrecho de Gibraltar.
Alfonso XI fracasó en el intento pero obtuvo otros éxitos; la batalla del Salado en el 1340 y la ocupación de Algeciras en el 1344. Con Alfonso XI el poder real salió fortalecido (Ordenamiento de Alcalá 1348) y durante el reinado de Pedro I la nobleza se sublevó dirigida por un bastardo de Alfonso XI, la rebelión triunfa y comienza un reinado de los Trastamara con Enrique II de las Mercedes.
Juan I (1379-1390) reforzó las instituciones, pero fue derrotado en Aljubarrota cuando defendió sus aspiraciones al trono de Portugal, se creó el Consejo Real y la Audiencia. Se organiza la Hacienda Real y se ponen los cimientos de un ejército permanente para defender la monarquía y el rey de Castilla era al mismo tiempo rey de Vizcaya.
Durante el reinado de Juan II (1406-1454) la autoridad real fue defendida por el valido Don Álvaro de Luna, la reconquista se reanudan con D. Fernando, regente de Castilla quien se apoderó de Antequera en el 1410, pasado un tiempo la reconquista ofrece algunas campañas esporádicas como la Higueruela en el 1431, después Enrique IV, (1454-1474), planeó atacar el reino nazarita de Granada pero no pudo llevarlo a la práctica por la crisis política que alcanza a todo su reinado y que culmina con la muerte del rey Enrique IV.
Desde el siglo XV, Castilla logró también dominar las Canarias con la ayuda del aventurero francés Jean de Bethencourt.

c- El reino de Granada
Se constituyó a mediados del siglo XIII y comprendía, aproximadamente las actuales provincias de Granada, Málaga y Almería. Se convirtió en vasallo de Castilla a quien pagaba impuestos. Su población se había incrementado con la llegada de los musulmanes que habían participado en las revueltas de Andalucía y Murcia. El reino de Granada subsistió hasta que fue conquistado por los Reyes Católicos.

4.4 Las rutas atlánticas: Castellanos y portugueses. Las islas Canarias.
Al comienzo de la Edad Moderna, momento álgido de los descubrimientos, hizo que aumentará los deseos de nuevas tierras y riquezas que fortalecían la estructura del Estado.
Fueron los pueblos ibéricos quienes protagonizaron dicho momento de descubrimiento y colonización allende los mares.
Los factores que ayudan a los descubrimientos fueron: el religioso (espíritu evangelizador), el afán de lucro mercantil (búsqueda de oro, piedras preciosas, materias primas, especias...), búsqueda de la fama y la aventura, así como el avance científico y técnico, propios y ajenos.
Los Monarcas defienden la economía mercantilista, que pretendían aumentar sus reservas de oro y plata para controlar los ejércitos y burocracias, cada vez más costosos.
Los comerciantes europeos pretendían hallar una ruta, que les permitiera obtener directamente productos de consumo básico muy baratos, como las especias: canela, pimienta (...), para poder evitar todo tipo de intermediarios árabes.
Las ideas geográficas del sabio alejandrino Tolomeo, se retoman y se reconoce la redondez de la Tierra.
Se amplió el uso de nuevos instrumentos técnicos: astrolabio, las cartas de navegar, la brújula, las tablas astronómicas, el almanaque. Además se añade la construcción de nuevas naves como la carabela (invento portugués), con velas latinas y dos o tres mástiles.
En 1484 Juan II de Portugal, recupera los estudios de la ruta de las Indias. La Junta de matemáticos (científicos y marinos), llegaron a la conclusión de que había cuatro caminos posibles para llegar a la India y sus resultados son:
- La primera ruta, llega a la India bajo la dirección de Covilham y Paiva..
- La segunda, llegó a Nueva Zembla, siendo imposible llegar a la India por dicha ruta.
- La tercera, realizada por Bartolomé Días, no llegó a la India, pero sí al Cabo de las Tormentas, o Cabo de Buena Esperanza (África), demostrando que este camino sí era posible desde este punto.
- La cuarta ruta, fue la del Oeste, escogida por los españoles; Colón en 1942.
Ante este suceso, Juan II de Portugal, adelantó sus planes, y en 1497 salió de Lisboa la expedición de Vasco de Gama, quien dio la vuelta a África llego a la India (1498).
Dos años más tarde, ordenó a Pedro Álvarez Cabral, ir a la India, se desvió hacia Cabo Verde, pero llego finalmente a la India y regresó a Portugal cargado de especias, se establecen puntos estratégicos y explotan la ruta sudafricana.
Las islas Canarias
Desde el reinado de Enrique el Doliente en 1404, se tenía la soberanía de las Canarias, pero en verdad solo cuatro de ellas, Fuerteventura, Lanzarote, Gomera Y hierro, estaban conquistadas y casi colonizadas, el resto no. Los portugueses seguían considerando a las Islas Afortunadas de su esfera de dominio.
Los Reyes Católicos decidieron conquistar las Islas, después de la definitiva renuncia portuguesa en la paz de Alcaçobas, se le hace el encargo al capitán Pedro de Vera, quien vence a los Guanches en 1484. Una nueva y definitiva campaña la lleva a cabo en 1492 Alfonso Fernández de Lugo domina la isla de la Palma y en 1496 la de Tenerife. Castilla consolida la conquista de las Islas Afortunadas (Islas Canarias), los Reyes Católicos deciden instalarse en ellas, como base de sus proyectos futuros.
Castilla repuebla las tierras con andaluces, se prohíbe la esclavitud, y se emprende la cristianización de los guanches con quien repartieron las propiedades que ayudaron a que fuese un éxito la colonización.
Castilla que arrastraba una crisis permanente durante toda la Edad Media, gracias a los Reyes emprenden la ruta mercantil de las Indias directamente atravesando el Atlántico, y se acepta la propuesta de Cristóbal Colón, para ello fue fundamental las posesiones canarias, de ir a las Indias por el Occidente.